Por: Noemí Limón Cruz

“La pícara pájara pica a la típica jícara; la típica jícara, pica la pájara”

“Erre con erre cigarra, erre con erre barril, rápido ruedan los carros cargados de azúcar del ferrocarril”

“Pablito clavó un clavito, un clavito clavó Pablito”

“Pancha plancha con cuatro planchas ¿con cuantas planchas Pancha plancha?”


¿Quién no se ha divertido repitiendo trabalenguas?

Los trabalenguas son textos u oraciones de tamaño corto cuya combinación de palabras dificulta su repetición, al hacerlo resulta divertido o gracioso.

Se les conoce también como destrabalenguas, son juegos de palabras o varias oraciones de difícil pronunciación, ya que tienen rimas internas o aliteraciones que exigen un mayor esfuerzo en el habla. Por lo general tratan de temas jocosos o imaginativos, existen en casi todos los idiomas (Etecé, 2021).

 

De sobra se reconocen la multitud de beneficios, en este artículo explicaré algunos de ellos:

Mejoran aspectos del habla como la articulación de fonemas y la fluidez con que salen los sonidos. Por ello son utilizados también en la terapia de los sonidos del habla, ya que bien utilizados favorecen una mejor dicción (hablar, pronunciar y usar las palabras).

Ayuda en el desarrollo de la fluidez verbal. Entendiendo a la fluidez verbal como una competencia neurocognitiva relacionada con aspectos lingüísticos, acceso al léxico, capacidad de recuperación y amplitud de vocabulario (PSISE, 2023).

Castillero (2017) menciona que la fluidez verbal permite establecer un diálogo en forma espontánea y clara, se establecen conexiones entre frases e ideas de forma natural, lo cual contribuye a que el discurso fluya adecuadamente en el tiempo.

A partir de estas conceptualizaciones se puede explicar porque los trabalenguas son especialmente buenos, en el caso del acceso al léxico, los trabalenguas están hechos de palabras comunes “Rosa Rizo reza en ruso; en ruso reza Rosa Rizo” (Rosa, rizo, reza, ruso) y de pseudopalabras  “Tengo una gallinita pinta piririnca piriranca, con sus pollitos pintos piririncos, pirirancos…” (piririnca piriranca, piririncos, pirirancos). Las personas tendríamos que reconocer las palabras de las que no lo son, o en su defecto adquirir palabras nuevas “No hay quien me ayude a voces a decir tres veces ocho: Ocho, corcho, troncho y caña, caña, troncho, corcho y ocho” (mi palabra nueva sería troncho, que significa tallo de las hortalizas o que en Cuba así se le llama a un trozo de pescado en conserva).

En cuanto a la capacidad de recuperación, está acción está asociada a la memoria, al principio, si se lee el trabalenguas entrará en juego la memoria de trabajo, al repetirlo más de una vez, pasará a la memoria de largo plazo y se recuperará de este bagaje lingüístico. Por ello también se ha asociado el beneficio que tiene aprender trabalenguas en el fortalecimiento de la memoria.

Estimulación de componentes del lenguaje como la pragmática, la semántica y la morfosintaxis. La pragmática en el lenguaje es la forma en que el discurso se ve influenciado por el contexto donde se expresa una idea para darle una interpretación al significado total, “Juan Quinto, una vez, en Pinto, contó de cuentos un ciento; y un chico dijo contento -¡Cuántos cuentos contó Quinto!-“.

Si bien la palabra quinto es un número ordinal, en este contexto corresponde a un apellido. La palabra pinto corresponde al presente del verbo pintar (yo pinto), sin embargo, en el refrán hace referencia a algún lugar.

En cuanto a la semántica (parte de la lingüística que estudia el significado de las palabras) el beneficio de los refranes sobre esta parte, veamos este ejemplo: “A mí mi mamá me mima, me mima a mí mi mamá” hay dos palabras “mi” (pronombre posesivo) pero uno hace referencia a quien está expresando la oración y el otro alude a que es “su mamá” (del interlocutor) quien le mima.

En lo referente a la morfosintaxis ésta es el área de la gramática que integra a la sintaxis (combinación de las palabras y los grupos que estas forman para expresar significados) y la morfología (los componentes y estructuras de las palabras), de lo cual se desprende que morfosintaxis es el estudio de la constitución, las relaciones y las combinaciones de las palabras, así como las reglas para que las oraciones tengan sentido y no resulten ambiguas (Porto & Gardey, 2022), un trabalenguas también favorece la morfosintaxis en el lenguaje hablado y escrito, por ejemplo en “cuando cuentes cuentos, cuenta cuantos cuentos cuentas” la oración está morfosintácticamente correcta. Al escuchar, repetir o leer trabalenguas, se enriquecen estas estructuras y éstas las podemos aplicar al formular otras oraciones.

“Me han dicho que has dicho un dicho, un dicho que he dicho yo, y ese dicho que te han dicho que yo he dicho no lo he dicho. Más si yo lo hubiera dicho, estaría muy bien dicho, por haberlo dicho yo: he dicho”.

(Imagen de Orientación Andujar.es)

Otro elemento que se ve beneficiado por los trabalenguas es la prosodia, que es un elemento vinculado a la entonación, acentuación, ritmo, velocidad del habla tanto de una palabra como de una oración, estos aspectos intervienen directamente con el significado y la interpretación de lo dicho, Cabré (2014) menciona que estos elementos aportan información referencial, dialectal, sociolingüística y emotiva. Leer, repetir o decir un trabalenguas ayuda a comprender mejor la importancia y necesidad de respetar las normas de acentuación y puntuación, ya que éstas ayudan a dar la entonación correcta y el mensaje se comprende mejor.

“Compré pocas copas, pocas copas compré y como compré pocas copas, pocas copas pagué”.

Finalmente, puedo mencionar que los trabalenguas al ser de naturaleza lúdica (divertidos, recreativos) favorecen un clima emocional idóneo para el aprendizaje de palabras nuevas, de cultura general, de uso adecuado de palabras y otros que se relacionen a una temática particular.

Por sus características fonéticas y fonológicas también ayuda al aprendizaje de la lectura.

Te comparto dos últimos trabalenguas, práctica y fortalece tu lenguaje, la memoria y el aprendizaje y echa a volar tu imaginación.

“Eres muy ingenuo Eugenio”.

“Señor Pedro Pero Pérez Crespo, ¿dónde mora?

Porque en esta Villa tres Pedros Peros Pérez Crespo había.

Pedro Pero Pérez Crespo el de arriba

Pedro Pero Pérez Crespo el de abajo

Y Pedro, Pero Pérez Crespo el de fuera de la Villa.

Yo no busco a Pedro Pero Pérez Crespo el de arriba

Yo no busco a Pedro, Pero Pérez Crespo el de abajo

Ni a Pedro Pero Pérez Crespo el de fuera de la Villa.

Sino a Pedro Pero Pérez Crespo Crespín

Que tenía una yegua y un rocín,

Crespa la cola, crespa la crín y crespo todo el potriquín”.

(Imagen de Pinterest)

Aunque los trabalenguas pertenecen a la tradición oral y se han ido transmitiendo de generación en generación sin autoría, los trabalenguas presentados en este artículo se encuentran en el libro Trabalengüero de Rincón, Rincón y Serratos (2005).


FUENTES DE INFORMACIÓN:

Cabré, L. L. (2014, 30 enero). Prosodia | Diccionari de lingüística on line. En: http://www.ub.edu/diccionarilinguistica/content/prosodia-0

Castillero, M. O. (2017, 5 octubre). Fluidez verbal: 12 trucos psicológicos para mejorarla. Psicología y Mente. https://psicologiaymente.com/social/fluidez-verbal

Etecé (2021, 5 de agosto). Concepto de trabalenguas. Para Concepto.de. Disponible en: https://concepto.de/trabalenguas/. Consultado: 18 mayo, 2024

Funciones Ejecutivas. (s.f.).  La Fluidez verbal: capacidad para los grandes discursos. En: https://www.funcionesejecutivas.net/fluidez-verbal/

Holguín, G. M. y Zambrano, C. E. (2020). El trabalenguas como estrategia para desarrollar la fluidez verbal en Educación básica elemental. En: Revista Cognosis, pp. 69-79. Obtenido de: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=8538829#:~:text=Los%20ejercicios%20a%20trav%C3%A9s%20de,de%20desarrollo%20de%20la%20memoria. 

PSISE. (2023, 10 enero). Fluidez verbal. En: PSISE. https://psisemadrid.org/fluidez-verbal/

Porto, J. P., & Gardey, A. (2022, 1 julio). Morfosintaxis - Qué es, definición y concepto. Definición.de. https://definicion.de/morfosintaxis/

Rincón, V.; Rincón, G. y Serratos, C. (2005) Trabalengüero. Nostra Ediciones. México.